La igualdad de género en el ámbito laboral ha sido un tema de creciente relevancia en las últimas décadas. A medida que las sociedades avanzan hacia un mundo más inclusivo, las empresas y organizaciones deben adaptarse y liderar este cambio.
A continuación, se explora algunos puntos en los que se espera que se sigan produciendo cambios y avances, así como posibles predicciones sobre cómo evolucionará la igualdad de género en el entorno laboral.
1. Crecimiento de políticas de diversidad e inclusión
Las empresas están reconociendo cada vez más la importancia de la diversidad e inclusión, no solo como un imperativo ético, sino también como una ventaja competitiva. Se espera que este tipo de políticas se conviertan en un estándar en todas las organizaciones, abarcando la igualdad de género y también la inclusión de personas de diversas razas, capacidades, identidades de género y orientaciones sexuales. En este sentido, conviene hacer mención a la reciente obligación para las empresas de 50 o más personas trabajadoras de contar con un Plan de medidas LGTBI y un Protocolo de acoso hacia personas LGTBI.
2. Aumento de la transparencia salarial
La brecha salarial de género sigue siendo un problema significativo tanto a nivel internacional, como también aquí en España. Sin embargo, se prevé un aumento en la transparencia salarial como una medida para combatir esta desigualdad. Un reflejo de este cambio lo vemos en el Real Decreto 902/2020 donde precisamente se desarrollan las herramientas de auditoría salarial y registro retributivo con el objetivo de favorecer la transparencia salarial, la detección de posibles brechas salariales y la introducción de medidas para corregirlas.
3. Conciliación
Todavía hoy en día las mujeres siguen asumiendo en mayor medida las tareas domésticas y de cuidados, tanto de hijos/as como de personas dependientes. Esto provoca que la falta de conciliación en el ámbito laboral se convierta en uno de los mayores obstáculos para su desarrollo profesional. Por ello, a partir de las últimas actualizaciones en normativas como el Real Decreto 6/2019 o la Ley de Familias, se trabaja por mejorar las medidas y condiciones de conciliación en las empresas, así como en la sensibilización para que tanto mujeres como hombres asuman este tipo de responsabilidades de forma igualitaria.
4. Mayor representación femenina en liderazgo
Aunque ha habido avances, la representación femenina en posiciones de liderazgo aún es insuficiente. Se anticipa que las empresas incrementarán sus esfuerzos para promover a mujeres a roles de liderazgo. Esto incluye la implementación de programas de mentoría y desarrollo profesional específicamente diseñados para mujeres.
5. Enfoque en la salud Mental y el bienestar
El bienestar de la plantilla, incluyendo su salud mental, está recibiendo más atención. Las empresas están reconociendo que un ambiente de trabajo inclusivo y equitativo contribuye al bienestar general de sus empleados y empleadas.
Para valorar si cuentan con un entorno laboral adecuado, cada vez más las organizaciones están incluyendo entre sus prácticas las encuestas de clima laboral, incluyendo en ellas preguntas sobre discriminación o acoso por razón de sexo, raza, orientación sexual, identidad de género, etc. De esta manera, consiguen extraer información sobre las preocupaciones y necesidades de su plantilla y plantear acciones de mejora en aspectos como el salario emocional, por ejemplo.
6. Cambio cultural y sensibilización
El cambio cultural dentro de las organizaciones es fundamental para lograr la igualdad de género. Esto implica desafiar estereotipos de género, promover una cultura de respeto y apoyo, y educar a todos los niveles de la entidad sobre la importancia de la igualdad de género. Cada vez son más las empresas que cuentan con un Plan de Igualdad y que se encuentran inmersas en la implantación de medidas que faciliten entornos de trabajo seguros e igualitarios para todas las personas que forman parte de su plantilla.
Conclusión
El futuro de la igualdad de género en el ámbito laboral está lleno de oportunidades y desafíos. Las empresas que lideren en esta área no solo estarán cumpliendo con sus responsabilidades legales, sino que también se beneficiarán de una fuerza laboral más diversa, innovadora y comprometida. Con políticas adecuadas, transparencia y un enfoque en la inclusión como el que se está implantando en los últimos años, podemos avanzar hacia un futuro donde la igualdad de género sea la norma, y no la excepción.